22 de octubre de 2025. – La minería ilegal vuelve a amenazar uno de los pulmones ecológicos más importantes de los Yungas paceños. Un grupo de mineros cooperativistas retomó las labores de deforestación y extracción de oro dentro del Parque Nacional y Área Natural de Manejo Integrado Cotapata, en la zona de Chuspipata, pese a que la actividad había sido paralizada el año pasado por orden de las autoridades ambientales.
El director del parque, Jorge Blanco, informó que unas 30 personas se encuentran operando de manera continua —día y noche— en el lugar, donde se abrió una nueva bocamina y se instaló maquinaria pesada sin ninguna autorización. Los guardaparques que intentaron intervenir denunciaron presiones económicas, amenazas y hechos de violencia, lo que dificulta las labores de control dentro del área protegida.
El Servicio Nacional de Áreas Protegidas (SERNAP) confirmó que existe un proceso penal en curso para frenar la explotación ilegal, aunque los resultados aún no se sienten en el territorio. Las comunidades cercanas a Cotapata, que dependen del turismo ecológico y la producción agrícola, expresaron su preocupación por el avance de la deforestación y la contaminación de los ríos con mercurio y otros químicos utilizados en la minería aurífera.
Por su parte, el nuevo director ejecutivo de la Autoridad Jurisdiccional Administrativa Minera (AJAM), Eddy Álvaro Antezana, reconoció que las denuncias por minería ilegal se han vuelto frecuentes en distintas regiones del país, especialmente en parques nacionales como Madidi, Apolobamba y Cotapata. Antezana informó que ya se presentó un recurso formal para activar la investigación correspondiente y que también se abrió un proceso penal por actividad minera ilegal en el Parque Madidi.
El funcionario advirtió que la minería sin control no solo afecta los ecosistemas, sino que debilita la institucionalidad del Estado al operar fuera de la normativa ambiental y tributaria. En ese sentido, propuso fortalecer la AJAM con un brazo operativo especializado, similar al de la Aduana Nacional, para ejecutar operativos directos contra la minería ilegal en áreas protegidas.
Ambientalistas alertan que Cotapata, declarado parque nacional en 1993 y parte de la Red Mundial de Reservas de la Biosfera, enfrenta una de las peores crisis ecológicas de los últimos años debido a la invasión de cooperativas mineras, que devastan la vegetación nativa y alteran los cursos de agua con desechos tóxicos.

